Los problemas relacionados con el alcohol y las drogas pueden surgir como consecuencia de factores personales, familiares o sociales, de ciertas situaciones laborales o de una combinación de estos elementos. Dichos problemas no solo tienen un efecto negativo sobre la salud y el bienestar de los trabajadores, sino que además pueden ocasionar muchos problemas laborales, incluyendo un deterioro del desempeño. Aun cuando la eliminación del abuso de sustancias es una meta altamente deseable, la experiencia ha mostrado cuáles son las dificultades y las posibilidades de lograrlo desde el lugar de trabajo. Existe una larga tradición de programas para abordar el problema del abuso de sustancias por parte de los trabajadores. Tradicionalmente se han centrado en la identificación y rehabilitación de las personas con problemas severos de abuso del alcohol y, más recientemente, de las drogas; en ambos casos, con un enfoque individual. Sin embargo, a medida que se ha profundizado en la comprensión del alcance, la naturaleza y los costos del problema, las empresas, organizaciones y paÃses más progresistas han hecho un mayor énfasis en el desarrollo de alianzas consensuadas entre las contrapartes en el lugar de trabajo, y fuera de este para diseñar estrategias de largo alcance dirigidas a una mejora real en la situación; se ha tomado en cuenta que hay múltiples causas para los problemas relacionados con el alcohol y las drogas y que, por lo tanto, existen también múltiples enfoques para la prevención, la asistencia, el tratamiento y la rehabilitación.
Al abuso del alcohol y otras drogas también se le conoce como "abuso de sustancias", a pesar de que este término incluye también otros elementos. En la siguiente tabla aparecen algunas de las sustancias de las que se abusa más comúnmente, algunas de ellas tienen diferentes nombres populares.
Sustancias de abuso común
Depresores del sistema nervioso centra
Estimulantes del sistema nervioso central
Opiáceos
Cannabinoides
Alucinógenos
Inhalantes
Recetas de venta libre, otros medicamentos de venta controlada y otras
Al alcohol, al tabaco y a otras drogas se les llama sustancias psicotrópicas porque afectan el cerebro. Alteran la actividad mental, la percepción y el comportamiento; su uso regular puede generar dependencia (adicción) y expone al usuario a riesgos, daños a la salud, además de que puede tener consecuencias sociales adversas.
Pueden surgir problemas relacionados con el uso del alcohol y las drogas como consecuencia de factores personales, familiares o sociales, de ciertas situaciones laborales, o de una combinación de estos elementos. Hay evidencia cientÃfica que vincula las condiciones laborales con el uso del alcohol y las drogas, la cual señala los siguientes factores contribuyentes al abuso de sustancias en el lugar de trabajo: la disponibilidad de alcohol y drogas en el trabajo, la presión social para beber o usar drogas en el trabajo, el estrés laboral, los viajes/separación de las relaciones sociales o sexuales normales, la falta de supervisión, los cambios frecuentes de colegas y supervisores, el trabajo monótono, el trabajo por turnos, el trabajo nocturno, el empleo precario y la posibilidad de quedar desempleado.
Los factores laborales que pueden aumentar el uso del alcohol y las drogas, especialmente entre los trabajadores vulnerables, incluyen: el trabajo por turnos: los viajes lejos de casa o el trabajo en lugares remotos; normas culturales que fomenten el uso de sustancias; la disponibilidad de alcohol y drogas en el lugar de trabajo o cerca del mismo; el estrés relacionado con el trabajo, que puede ser resultado de una remuneración no equitativa, trabajo bajo presión de tiempo, exigencias de alto rendimiento sostenido, de falta de claridad en los roles, de inseguridad del empleo, de una comunicación insatisfactoria, aburrimiento, falta de creatividad y variedad; la falta de control sobre el trabajo (por ejemplo sobre las horas extra que se trabajan o la carga de trabajo en sÃ).
El abuso de sustancias tiene un fuerte impacto sobre el lugar de trabajo, incluyendo el desempeño laboral general (por ejemplo productos de menor calidad, trabajos por rehacer), la rotación de personal, costos de recontratación cuando los trabajadores dejan la compañÃa (como la pérdida de memoria de la organización, las compensaciones por despido, el reclutamiento y los costos de orientación), las responsabilidades legales asociadas con los accidentes y las lesiones, aumento de permisos por enfermedad u otros costos en prestaciones de salud para los trabajadores, comportamiento conflictivo y empobrecimiento de las relaciones laborales; robos y vandalismo, quejas y arbitrajes. Aunque algunos de los costos, como el del aumento de las ausencias, los accidentes y errores pueden ser atestiguados o medidos, hay otros que son más difÃciles de identificar, como la baja moral y las tasas elevadas de enfermedad. Sus efectos son igualmente perjudiciales. Las primeras señales de abuso del alcohol o las drogas son malestares, resaca, temblor en las manos, demoras, almuerzos prolongados y salidas adelantadas. El abuso suele generar estrés, nerviosismo, irritabilidad, resentimiento y un deterioro del estado de ánimo, además de fricciones y peleas con los colegas. Estas manifestaciones pueden ir acompañadas de un descuido del desempeño, una menor producción y malas decisiones que pueden ocasionar o contribuir a accidentes en el lugar de trabajo, una menor productividad, una imposibilidad de cumplir las fechas y la pérdida de clientes.
Recursos de la OIT:
SOLVE: Integrando la promoción de la salud a las polÃticas de SST en el lugar de trabajo, GuÃa del (https://www.ilo.org/wcmsp5/groups/public/---ed_protect/---protrav/---safework/documents/instructionalmaterial/wcms_203378.pdf)